Una de estas noches empujé la puerta de mi cuarto
y cuál fue mi susto que allí me estaba esperdando
/ ya tendida en la cama /
la hijita adolescente del Sr. Mallarmé
Ella entonces escondió
con un brazo como ala
los pechos
y con la otra mano, el vello del pubis
/el más íntimo trigo /
e inmediatamente se volvió
para darme la espalda / para quedar,
lector mojigato
esta página
que te extiendo
en blanco.
Con sus pasos cantados (1998)
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